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En el presente trabajo se utilizo el caso de una nieta restituida en el 2008 por las abuelas de Playa de Mayo llamada Laura Catalina De Sanctis Ovando. La joven fue apropiada, luego de su nacimiento en el año 1977. Se trabajo con un testimonio, coproducido por el Canal Encuentro y por Abuelas de Plaza de Mayo, para una serie de micros documentales llamada “Acá estamos”(2012), donde cada uno de los nietos que han recuperado su identidad cuentan sobre sus historias de vida. Allí Laura participo de este documental, comentando los sentimientos y pensamientos  atravesados antes y después del encuentro con su identidad y de haber declarado como querellante en el juicio contra sus apropiadores (María Francisca Morilla y Carlos Hidalgo Garzón ), involucrándolos directamente.

Para conocer más información sobre los hechos, se han seleccionado tres materiales periodístico digitalizados. Dos de ellos corresponden al diario: Página/12 (2014). El primero esta subtitulado: “Me da tranquilidad y alivio”, donde Laura refiere al juicio y condena de uno de los victimarios que intervino, facilitando su apropiación. Se trata de Lidia Fanny Villavicencio y fue la médica que adulteró datos de su nacimiento. La segunda noticia amplia lo mencionado y su subtitulo es: “Obstetra en una maternidad clandestina”. El tercer periódico es el de Abuelas de Plaza de Mayo y su tapa presenta el caso con una foto de la protagonista sosteniendo los retratos de sus padres. Aquí, subtitulan la noticia como: ”Ocho años de prisión para la partera que fraguó la partida de una nieta”.

Ambos materiales se encuentran relacionados con la bibliografía obligatoria: “Destinos del testimonio: víctima, autor, silencio”(2014) y algunos lineamientos de la materia Ética y Derechos Humanos.

 

Breve presentación del juicio:

Causa caratulada: “Villavicencio, Lidia Fanny s/recurso de casación” (N° 2806)

Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°1 de San Martin

Jueces: Dr. Héctor Sagretti, Daniel Cisneros y Daniel Petrone.

Querellantes: Dra. María Inés Vedia alegó en representación de las querellantes: Laura Catalina De Sanctis Ovando y la Asociación de Abuelas de Plaza de Mayo.

Acusada: Lidia Fanny Villavicencio (91 años en el momento del juicio)

Testigos: Laura Catalina de Sanctis Ovando, su marido Rodrigo Amieva (quien la acompaño durante todo el proceso de recuperación de identidad y declaró como su esposa le contó su origen), el perito calígrafo Guillermo Anzórena, Lidia Villavicencio (la obstetra declaró que cuando estaba en el hospital atendió el parto de una mujer vendada del que le ordenaron que no le hablara) Jorge Villavicencio (el hijo de la obstetra, quien confesó que su madre trabajo en el Hospital Militar de Campo de Mayo y que se jubiló en el año 1979). También brindaron testimonios parteras y médicas que se encontraban trabajando en el Hospital Militar de Campo de Mayo en 1977 (ellas dijeron que era frecuente ver a mujeres detenidas en el hospital)

Algunas de las pruebas: Prueba caligráfica donde se demuestran firmas de los doctores adulteradas pertenecientes a la médica.

Se ordeno la extracción de muestras de ADN de objetos personales de la joven para compararlos con los perfiles del Banco nacional de Datos genéticos.

En el libro de partos figura la palabra “cesárea”, y luego tachada remplazada por “legrado feto sin vida de 45 días”

Sentencia: Se condeno a Lidia Fanny Villavicencio, como participe primaria de los delitos de retención y ocultación de un menor de diez años previamente sustraído y de supresión de identidad de un menor de diez años; y como autora de falsedad ideológica de documento público en perjuicio de Laura Catalina de Sanctis Ovando, a la pena de ocho años de prisión, accesorias legales y el pago de costas.

Contexto: Este juicio fue llevado a cabo gracias a la nulidad de las Leyes del Perdón, que hasta antes del 2003 impedían que los responsables de los delitos de lesa humanidad fueran juzgados. En el año 2005se declararon inconstitucionales dichas leyes.

 

Implicaciones subjetivas del acto de testimoniar:

En los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura Argentina (1973-1986) hubo un plan sistemático  de violaciones de derechos humanos y de destrucción de pruebas incriminatorias, es por ello que la función del testigo resulta fundamental.

Además de declarar en los juicios, Laura brindó su testimonio para el programa “Acá estamos” transmitido por Canal Encuentro (2012).Allí relato, al igual que en los juicios, que a medida que iba creciendo tenía dudas sobre su identidad hasta que por primera vez vio un anuncio televisivo de Abuelas y tuvo la certeza. De este modo fue obteniendo una respuesta a la pregunta ¿Quién soy? y conociendo algo de lo que ocurrió con sus verdaderos padres. Lo impactante es que cuando se entero de la verdad, sus apropiadores le decían que si hacia algo al respecto ellos irían presos, que ella había quedado sola y sus abuelos no se hacían cargo, que la historia no era como la contaban las abuelas; y todo tipo de manipulaciones que le provocaban culpa el hablar. Pareciera como si seguirían decidiendo sobre Laura, la usarían como objeto para que los siga sosteniendo en un lugar de “padres”. Hay un discurso perverso. Es evidente el particularismo que se presenta tanto en estos padres, como en todas las personas que participaron desde una posición de poder. Hay un rasgo particular que lo incorporan como universal, obteniendo ventaja, sin pensar en la joven o en su familia.

En el texto “Farsa y ficción. Usurpación y paternidad en la constitución subjetiva” (2008) Gutiérrez y Montesano enuncian que cuando hay alguien que construye un aparato de manipulación, como ocurrió en este caso. Las consecuencias de la farsa pueden alcanzar un resultado aniquilador.

Podría pensarse que el lugar que ocupo la niña en la pareja que la apropio, estaría exclusivamente del lado del narcisismo de ellos. Habría una demanda del orden de la completud. Ella creció sabiendo que desde ese lugar siempre tenía que hacer algo para que la quieran.

Como explica Kletnicki en “Niños desaparecidos: lógica genocida y apropiación ilegal” (2004), junto a el secuestro de su madre y luego de unos meses la desaparición física de Laura se sumo la apropiación psicológica, ya que la función de filiar sello en ella un orden estructural y unos elementos que no están predeterminados.La restitución sería la intervención capaz de restablecer los lugares originalmente perdidos.

Asimismo se observa la falta de responsabilidad subjetiva que hay en dichos apropiadores. Si bien le confesaron la verdad de que ellos no eran sus padres, cuando la joven se lo pregunto, no se hacían cargo subjetivamente de la falta cometida, negando sobre lo negado.

Kletnicki explicó en “Niños desaparecidos: la construcción de una memoria” (2000) que en los casos de niños desaparecidos que han nacido en cautiverio, se produce una negación del nombre, de la historia, del deseo que los espera y estas consecuencias alcanzarán las próximas generaciones, quienes tampoco sabrán la verdad sobre sus antepasados. Enterarse que todo ello se le privo durante tantos años, produjo diferentes efectos en Laura.

En el documental “Acá estamos” Laura refirió que no se sentía con libertad de arrimarse a Abuelas porque le hicieron sentir que ello iba a significar tomar partido. Pero luego de un largo proceso la víctima afirmo dar cuenta de algo que la impulso a declarar. Era un requisito que sus papás hayan desaparecido para que los apropiadores se quedaran con ella. (De Sanctis Ovando, 2012)

La restitución a nivel jurídico vuelve la nieta en donde estaba antes, pero las huellas no se borran para la subjetividad. El universo cerrado que Laura tenía se tambalea ocasionando estragos psicológicos.

La joven refiere, como efectos subjetivos, un gran alivio que sintió luego de ir en búsqueda de la verdad. Declara que durante mucho tiempo no quería atender a sus sospechas ya que le costaba preguntarse. De hecho no quería hacerse el ADN y para evitarlo escapo a Paraguay. Pero al darse cuenta de las mentiras decidió ser querellante en la causa. A ello se le suma que en un allanamiento en la casa de sus apropiadores se encontró una carta que describía una lista de repartos de bebés. Finalmente todo fue cayendo como efectodomino para terminar de “abrir los ojos”.

Luego del juicio a la partera que realizo el certificado de nacimiento falso,Laura comento en Pagina/12que el estar allí fue muy movilizante, a pesar que pensaba que se le haría liviano. Aseguro además que dicho juicio, donde la médica ya era una anciana, la hizo pensar en sus abuelos que tendrían la misma edad, pero ya no viven y no logro conocerlos. Asimismo agregó que los años que tenga la médica no hacen irresponsable sino que tuvo toda una vida para reflexionar y hacer algo para contar lo que sabía (De Sacntis Ovando, 2014). Esto último se relaciona al silencio nombrado por Noailles y Gutiérrez (2014). Ellos manifiestan que el silencio, en estos casos, significa crueldad e indiferencia ante el dolor de familiares, pudiendo haber hecho algo para aliviar ese dolor. El silencio también estaba apoyado por la jerarquía eclesiástica.

En el testimonio para el programa “Acá estamos”(2012), reiterada veces interrumpe su relato por sus llantos repentinos que la dejarían sin palabras. Esto ocurrió cuando detallo la historia de sus padres y mayormente al repetir que uno no tiene que hacer nada para que los padres lo quieran, porque el amor de ellos es incondicional y esto es lo que no le hacían sentir sus apropiadores.

Un dato muy importante es que Laura contó en dicho documental que fue un alivio cuando logró empezar a compartir todo lo que le sucedía y las dudas que tenía. Esa mejoría arribo también gracias a que mucha gente la acompaño. Asegura que le era dañino quedarse con las mentiras, seguir engañándose (De Sanctis, 2012)

En una entrevista para el diario Abuelas de Plaza de mayo exclamó: “Para mí era muy importante tener voz en esta causa, por mi, por mis papás y por mis abuelos. Cuando me explicaron el rol que tiene cada uno en la causa como víctima, no quise declarar solo como víctima, sino como protagonista, como la voz de mis papás.”(1)

Estrategias de intervención desde el campo psicológico  que acompaña al testigo:

Las Abuelas de Plaza de Mayo cuentan con un centro de atención psicológica por el derecho a la identidad. Atentas a la singularidad del delito de apropiación, desde el año 2003, funciona este espacio de salud mental integrado por psicólogos capacitados para intervenir en el problema, permitiendo encontrar respuesta para seguir adelante con sus vidas. Por lo tanto se infiere que se cumplirían las estrategias psicojuridicas desarrolladas en el libro “Destinos del testimonio:

(1) De Sanctis; L. “Ocho años de prisión para la partera que fraguó la partida de una nieta”. De Abuelas de Plaza de Mayo (2014). Mensuario Nº 131.Buenos Aires, Argentina.Pág:1. URL: https://www.abuelas.org.ar/categoria-difusion/mensuario-1?pagina=3

 

víctima, autor y silencio” (Gutiérrez, Noailles;2014), donde un equipo de psicólogos acompañan y cuidan a la victima otorgándole un lugar como sujeto con el fin de evitar que la experiencia de testimoniar sea retraumatizadora. Además preparan a la persona antes, durante y luego de un juicio, evitando el sufrimiento psíquico y evaluando siesta en condiciones de declarar. También se le indica quienes estarán en el juicio, se anticipa que habrá publico que escuchara su relato, que pueden pedir que sean apagadas las cámaras para resguardar su intimidad, se le pregunta si quieren ir acompañados y se le responde cualquier duda. Esta estrategia es útil para disminuir los niveles de ansiedad presentados por los testigos, muchas veces producido por miedo a olvidar algo. Después de las audiencias se asegura que la persona haya quedado en las mejores condiciones posibles. Se realizan encuentros grupales con los testigos y en casos necesarios se inician espacios de contención terapéutica.

Según Gutiérrez y Noailles (2014) la condena jurídica que no contenga una dimensión simbólica y subjetiva puede ocasionar daños y sería contraproducente para el testigo.

 

Conclusión:

Se propuso el ingreso a una historia más, de las tantas tan oscuras y dolorosas durante la última dictadura argentina. Pero también se mostró como finalmente el horror probado logro ser algo reparado con ayuda de la restitución de la identidad.

La joven tenía que decidir algo y hasta el hecho de no hacer nada ya era una decisión. Lo importante fue que en Abuelas encontró esa oportunidad.

Laura logro ir en búsqueda de la verdad, interpelando y decidiendo qué hacer con eso. En este camino los psicólogos la acompañaron y cuidaron, atentos a la escucha. Interrogando sobre todo: qué le pasa a ella con eso que le paso y conteniéndola.

Sin la estrategia psicojurídicas se estaría tomando al testigo como un objeto, por ende se maltrataría a la victima aunque el victimario cumpla con la condena. Un juicio ayudaría a alcanzar una reparación simbólica, pero es necesario además pensar cuál es el tipo de reparación más adecuada en cada caso.

Lo importante en el caso Laura es que tanto su pareja, como sus familiares, la justicia y la institución de Abuelas de Plaza de Mayo, han logrado asegurarle que cuando tomará la decisión no estará sola.

 

 

 

Bibliografía:

 

– Abuelas de Plaza de Mayo. Centro de atención psicológica por el derecho a la identidad. C.A.B.A, Argentina. Recuperado de: https://www.abuelas.org.ar/dudls-sobre-tu-identidad/centro-atencion-psicologica-el-derecho-la-identidad-17

– Gutiérrez;C, y Montesano; H. (2008). Farsa y ficción. En Filiación: ciencia y arte. La restitución como problema epistemológico y como acto creador. Aesthethika, Vol.4 Número 1, Junio 2008. Versión online en hhttp:77aesthethika.org/Farsa-y-ficcion-Usurpacion-y

– Gutiérrez;C y Noailes; G. (2014). Destinos del testimonio: víctima, autor y silencio: Los testigos en los juicios por crímenes de lesa humanidad.1° ed.Buenos Aires: Letra viva.

– Kletnicki;A. (2000). Niños desaparecidos: la construcción de una memoria. En La encrucijada de la filiación. Tecnologías reproductivas y restitución de niños. Lumen/humanitas; Buenos Aires; 2000.

– Kletnicki;A.(2004); Niños desaparecidos: lógica genocida y apropiación ilegal. En Daniel Feierstein y Guillermo Levy (comp.): Hasta que la muerte nos separe. Poder y Práctica. Sociales genocidas en América Latina; ediciones al Margen; buenos Aires; 2014.

– Monterubbianesi; N (2014).”Ocho años de prisión para la partera que fraguó la partida de una nieta”. Mensuario Nº:131. Abuelas de Plaza de Mayo. Recuperado de: https://www.abuelas.org.ar/categoria-difusion/mensuario-1?pagina=3

– Pagina/12 (2014). “Me da tranquilidad y alivio”. Recuperado de: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-247417-2014-05-30.html

– Romero; P.(2012) Canal Encuentro. “Acá estamos”. Zafra Producciones y Barackacine. Buenos aires, Argentina. Recuperado de: http://www.encuentro.gov.ar/programas/serie/8376/4514

– Sagués;G. Colegios de abogados de San Isidro.  Expediente Lidia Fanny Villavicencio. Recuperado de:

http://www.casi.com.ar/sites/default/files/35 villavicencio.pdf

– Vales;A. Pagina/12 (2014). “Obstetra en una maternidad clandestina”. Recuperado de:

http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-247224-2014-05-28.html

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 



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